La piel de un bebé es extremadamente sensible y cualquier cambio, tanto en la alimentación como en el tejido que está en contacto directo con su piel, puede hacerle reaccionar. La dermatitis del pañal es un problema que aparece en la piel, sobre todo por la zona de debajo del pañal del bebé.
Aunque el bebé haya pasado los nueve meses de gestación en la tripa de la madre, su desarrollo de este no ha terminado, ya que los órganos acaban de madurar tras el parto 01.
De hecho, la piel es un órgano más, el más grande de todo el cuerpo y en el caso de los recién nacidos, el más sensible. Es tal su sensibilidad que está considerada como la piel idónea, pero tiene algunos tipos de particularidades que la convierten en susceptible de presentar problemas como la irritación, manchas, sequedad y erupciones 01.
Tal es la delgadez de este tipo de piel que se ha comprobado que es cinco veces más fina que la piel de una persona adulta. En concreto, es que el espesor de la piel aumenta a medida que el bebé crece y, no es hasta la pubertad, que no se desarrolla por completo. En el bebé, la capa córnea (conocida como la parte externa de la epidermis) es especialmente permeable a agentes químicos e hipersensible a las radiaciones solares y es que la producción de melanina es mucho más lenta, por eso es vital proteger su piel de las radiaciones solares 01 y 02.
Este tipo de afección se puede dar por varios factores, entre ellos encontramos:
La dermatitis del pañal tiene una prevalencia de alrededor del 70% en los menores de dos años sin diferencia de género o raza. Sin embargo, los bebés alimentados con leche materna parecen tener un riesgo más reducido 03 y 04. Además, este tipo de afección impacta de manera distinta dependiendo de la edad del bebé. Por eso, se distinguirán entre dermatitis típicas en el recién nacido, en el lactante menor y en el lactante mayor.
Este tipo de dermatitis es principalmente perianal, siendo el rasgo más característico la piel roja y brillante cerca del ano. Habitualmente, tiene relación con las sustancias irritantes presentes en las heces. En ocasiones, la dermatitis se puede complicar con la aparición de la candidiasis. Suele ser una consecuencia de la dermatitis de pañal y es habitual que ocurra por una sobreinfección de hongos del género de la cándida 03.
Este tipo de afección suele aparecer entre la segunda y la cuarta semana de vida y se puede identificar en forma de pequeñas placas rosadas, que pueden aumentar de tamaño llegando a producir descamación amarillenta de aspecto graso. En este caso, un cuidado adecuado es vital para evitar una futura dermatitis atópica o psoriasis 03.
La edad del lactante menor comprende desde los 28 días hasta los 12 meses y este tipo de dermatitis puede ir desde la irritativa hasta la psoriasis 03 y 05.
En el lactante menor también se puede dar la dermatitis friccional, causada por el uso del pañal. Puede manifestarse con un eritema (enrojecimiento de la piel causado por una inflamación) en las nalgas, genitales, cara interna de los muslos y abdomen; pero responde rápidamente al tratamiento 03.
Este tipo de afección está causada por químicos, ya sea medicamentos por vía oral, jabones o detergentes. Sin embargo, también puede ser consecuencia de la humedad o el calor excesivo, haciendo que la retención del sudor en el área del pañal crezca y se produzca la irritación. Al igual que ocurre en la dermatitis friccional, es importante aplicar el tratamiento adecuado desde los primeros síntomas. En caso de no hacerlo, este se puede extender al resto del cuerpo 03.
Este tipo de dermatitis se caracteriza por el escozor y la sequedad, pudiendo iniciarse con la dermatitis seborreica 03.
No es habitual en niños menores de dos años, pero se puede dar. También ocurre en la zona del pañal a consecuencia de una erupción. Es posible identificarla porque se pueden dar placas de color rojo rubí y escamas plateadas, pareciéndose a la psoriasis típica del adulto. Se puede extender al tronco, las extremidades, las axilas, el cuello, la cara y el cuero cabelludo 03.
El lactante mayor comprende desde los 12 hasta los 24 meses y, en esta fase, son típicas las dermatitis del pañal amoniacales, pero también pueden aparecer algunas de las mencionadas anteriormente 05.
A medida que el bebé va creciendo, su dieta puede cambiar, por tanto, aumenta la acidez de las heces y a su vez, la posible irritación. Uno de los factores que desencadena este tipo de dermatitis es la presencia y la acumulación de amoníaco en el pañal 03.
Para tratar la dermatitis de pañal, el cuidado de la piel del bebé tiene que ser constante y después de cada cambio de pañal. Pueden utilizarse dos tipos de productos, los que se utilizan de forma previa y los productos para curar la dermatitis, cuando esta se complica.
SUD-ES-NP-00009
Muñoz M.J. Higiene y cuidados de la piel del bebé. Elsevier. 2003, vol. 22, no 3, p. 73-82. Disponible en: https://www.elsevier.es/es-revista-offarm-4-articulo-higiene-cuidados-piel-del-bebe-13044453
Estructura y funcionamiento de la piel. Manual MSD. Disponible en: https://www.msdmanuals.com/es/hogar/trastornos-de-la-piel/biolog%C3%ADa-de-la-piel/estructura-y-funcionamiento-de-la-piel
Suárez S. Dermatitis del pañal. Abordaje eficaz. Elsevier. 2002, vol. 16, no 11, p. 52-57. Disponible en: https://www.elsevier.es/es-revista-farmacia-profesional-3-articulo-dermatitis-del-panal-abordaje-eficaz-13041486
Dermatitis del pañal y trastornos relacionados. Pediatría General. Disponible en: https://www.pediatriaintegral.es/publicacion-2016-04/dermatitis-del-panal-trastornos-relacionados/
Lactante. Pontificia Universidad Católica de Chile. Disponible en: https://www7.uc.cl/sw_educ/enferm/ciclo/html/lactante/lactante.htm